domingo, 11 de diciembre de 2011

Bicigrinos: II Quedada Mallorquina

Sábado, 1 de Octubre a las 09h. Ese fué el día seleccionado entre los "pocos" bicigrinos mallorquines para conocerse. La ruta corrió a cargo de Lince. Una ruta irregular con subidas y bajadas de todos los tipos, tal y como muestra el perfil proporcionado por Kunde y en el que encontramos todo tipo de suelos, desde la típica gravilla hasta la arena virgen de las calas mallorquinas, como el puro barro que ofrece el torrente tras un día de lluvia:


Para los más curiosos, aquí está la ruta realizada.

Tal y como se acordó, los 4 bicigrinos mallorquines nos presentamos a las 9h en el parking de Ágora, aunque yo como siempre, llegando con un poco de retraso a todas partes.
Al llegar, allí ya se encontraban Lince y Kunde listos para la batalla del día. Junto a ellos, se encontraba Absolut, el cual por temas de trabajo solo pudo asistir a esta quedada para saludar.

                

Tras varios saludos, presentaciones y varias bromas sobre la "lluvia" que se avecinaba (posible impedimento en días anteriores) nos subimos a las bicis, nos despedimos de Absolut hasta la próxima e iniciamos la ruta, capitaneada como he dicho antes por Lince.


La ruta empieza por el paseo de Calvià, el cual nos lleva hasta Magalluf. A partir de ahñi, abandonamos dicho paseo para adentrarnos ya en tierra por el Camí de sa Porrasa. Un pequeño repecho que nos hace sudar las primeras gotas de sudor y, tras una pequeña bajada posterior, nos lleva a la primera cala de la mañana, Cala Falcó. Dado el tiempo, que no sabía si llover o salir el sol, y la hora que era, la cala se presentaba vacía en cuanto a playeros, exceptuando los currantes del chiringuito.





Al acabar una sesión de fotos más, volvemos a subir y Tras un breve paseo por los aledaños del Casino, bajamos a Portals Vells y conectamos con la playa nudista del Mago. Kunde oteo con los prismáticos (que por supuesto también llevaba entre sus utensilios), pero por lo temprano de la hora no vio nada "interesante" de género alguno...

                   






Tras la salida del Mago con unas subidas rompepiernas, nos dirigimos por montaña hacia la isla de el Toro. Y sube, y sube, y sube....


Desde la cumbre hay varios islotes alineados que recuerdan a los Cayos de La Florida y que terminan en la isla de El Toro.

         

Tras salir y atravesar El Toro (municipio), nos dirigimos hacia Santa Ponça y hacemos una parada justo delante de las islas Malgrat. Un breve parada en un chiringuito para que mi menda se avitualle de líquido.Rumbo por un torrente hacia Es Capdellá.


 


El recorrido por el angosto camino paralelo al torrente está lleno de charcos en los primeros tramos y especialmente el que suscribe se pone de barro hasta la veleta.

Ultima fase de la jornada. Llegamos casi hasta Es Capdellá y nos volvemos tranquilamente al punto de origen tras atravesar Calviá hasta Bugadellas entre campiña y pinares y volvemos a enganchar el Paseo Calviá, por donde empezamos a primera hora de la mañana, para atravesar Palmanova y alcanzar el punto de origen. Lo que queda es casi todo de bajada, lo que se agradece.






Esperemos realizar otra próxima quedada con la asistencia de Absolut y otros posibles bicigrinos de Mallorca u otro lugar.

* Crónica y fotos realizadas por Lince y Kunde en este post de la web www.forobicigrino.com.


Bicigrinos: III Quedada Mallorquina


Aquí tenéis tanto las fotos como la ruta de la III Quedada Bicigrinos Mallorquines a la que se presentaron Enric, Curro, Bernat y Àlex. Posteriormente, realizaré la crónica de dicho evento.

He tenido problemas para subir la ruta. En cuanto pueda, lo arreglo y lo subo en condiciones. A continuación, tenéis la ruta de la quedada. En el enlace de abajo tenéis el perfil y los datos de dicha ruta (Clicando en el pincho de fin de etapa):




Ver 2011-12-10 Son Noguera-cala Pi- Son Moro en un mapa más grande


Y aquí está mis fotos:


Iniciamos la ruta por carretera y poco después nos adentramos en pistas de tierra.

Enric (Absolut) y Curro (Lince).

Tras una breve parada, Bernat (Kunde) decide ir a inspeccionar.

Campos del Interior de Mallorca.

Foto familiar de los Bicigrinos Mallorquines.

Más pistas de tierra.

Àlex (Friki) y Curro (Lince).

El móvil de Enric (Absolut) no paró de sonar.

Intento de foto de los "4 mosqueteros"

Cala Pi



Pese a que estaba un poco nublado, pudimos otear la isla de Cabrera en el horizonte.


Enric y Bernat bromeando junto a la torre de Cala Pi.



Bernat haciendo de las suyas con Cabrera al fondo.


¿¿Quienes son??

Al final de la jornada, Enric (Absolut) nos mostró su próximo proyecto para el Camino. Está teniendo problemas para encontrar un portabultos compatible, aunque no rechaza la opción de un remolque.





jueves, 20 de octubre de 2011

Día 1: Palma de Mallorca - León

Para ser el primer día ya empezaba mal.
Había quedado con Jaume para recogerle en su casa sobre las 5:45h. y me llama casi a las 6 para ver donde estaba...en efecto, estaba en la cama. El despertador no había sonado así que tuve que vestirme rápido y sin tiempo de desayunar salir en busca de Jaume para luego parar en el aeropuerto.
Menos mal que la distancia era corta y que con el mañaneo apenas había tráfico. Eso nos hizo llegar sobre las 6.15 al aeropuerto con tiempo de sobra para dejar las alforjas y embarcar tranquilamente.
Allí ya se encontraba Kiko, que sin esperar a nadie había facturado su alforja mientras nosotros hacíamos cola aunque, el haber sacado las tarjetas de embarque el día anterior nos facilitó el proceso. Acto seguido, decidimos pasar el filtro y esperar tranquilamente en la puerta de embarque, lugar donde se me cayó medio mundo. Tras buscar en todos los bolsillos del pantalón, me dí cuenta de que mi móvil me lo había dejado en el coche. Esto querría decir que me pasaría el Camino sin Facebook,Gmail, juegos, etc. para matar el tiempo. Es decir, totalmente desconectado de mi vida y con el único enlace de mis compañeros sobre éste.
Si se dice que el Camino es un viaje hacia tu interior, desconectando de cualquier enlace sobre tu vida cotidiana, yo lo iba a cumplir a rajatabla.
Tras superar dicha pérdida :p nos encaminamos hacia Madrid con 15 minutos de retraso. La verdad que el tiempo nos preocupaba un poco dado que como novatos en el Camino también lo eramos con el metro, sobretodo en Madrid. Varios amigos y conocidos nos habían dado distintos tiempos de distancia entre el aeropuerto y Chamartín, estación donde salía nuestro tren.Aclarar que ninguno dió con el tiempo.
Llegamos a la T2, cogemos nuestras alforjas y como guiris puros y duros empezamos a dar vueltas hasta dar con la estación. El trayecto duró unos 30-35 minutos, el cual nos lo tomamos con calma al contrario que los madrileños y su estresada vida en la capital. Así que nos presentamos en Chamartín a las 10:10 más o menos y con tiempo de sobra para coger el tren que nos llevaría hasta León, ciudad de destino en este primer día.
Aprovechamos para comer unos bocatas para merendar y tras un buen rato de espera cogimos el tren. El trayecto duraría unas 4 horas y media así que, imaginaros el trayecto. Durante la primera hora todo perfecto, buenas vistas, bromas, risas, etc. Una vez pasada esta hora, no parábamos de mirar el tiempo que quedaba hasta León.
Uno de los pasatiempos del camino fué como nos lo ibamos a montar para llegar hasta el Polígono Onzonilla, a las afueras de la ciudad. Los de Seur nos la habían clavado y para poder recoger "paquetes grandes" debíamos ir al almacén.
Otro pasatiempos fué una mujer la cual, sin ánimo de ofender, se las quiso dar de lista con el camino y, sin comerlo ni beberlo, ensanchó más la península para marcar una distancia de 800km entre León y Santiago.
Menos mal que, su cabeza empezó a funcionar y supo rectificar a tiempo.
Al fin llegamos a León. La mujer anteriormente citada, nos comentó que podríamos llegar a Onzonilla en autobús, aunque la estación nos la indicó hacia el lado contrario, así que el próximo objetivo era encontrar la estación de autobuses y una vez allí dar con el bus que nos llevaría hasta el polígono. Preguntando dimos con la estación y una vez supimos que autobús coger, solicitamos un mapa de León para el regreso hasta el albergue. Otra sorpresa más, o en León los mapas se dan por fascículos o por la crisis solo te daban la mitad del mapa. Con esto no nos quedo otra que memorizarnos el camino para poder regresar. La verdad que el trayecto fué fácil. Otra cosa de agradecer fué que, no sé si porqué el conductor nos vió cara de perdidos que nos dejo justo enfrente de Seur, nuestro segundo objetivo del día.
Allí pedimos las bicis las cuales tuvimos que montar ya que estaban medio despedazadas para poder meter en la caja y acto seguido de vuelta a León. Esté último tramo nos fué más fácil de hacer con ayuda del mapa y rápidamente dimos con el albergue donde pasaríamos la noche.
Una vez alojados, nos cambiamos y dimos una vuelta por la ciudad. El tiempo ese día no acompaño mucho ya que, tras una parada en Burger King para comer algo, empezó a llover aunque tal cosa no nos impidió nuestro paseo por la ciudad. Compramos algo para el día siguiente y regresamos al albergue el cual cerraba a las 21:30h.

Los datos de este albergue los encontraréis aquí (Albergue del Monasterio de las Benedictinas - Sta. María de Carbajal)
El trato fué bueno aunque no lo eran tanto las literas, las cuales como somier se usaba una tabla de madera y no había almohada aunque, dentro de lo que cabe, se podía dormir. O no...

Día 2: León - Astorga

Kilómetros día: 52.66 km
Tiempo rodando: 4:05:20 h.
Kilómetros recorridos: 52.66 km

Son las 6:15h y empieza a haber jaleo. Bueno, en realidad el jaleo no había parado en toda la noche. Delante del albergue había una plaza en la cual, siendo viernes noche, la gente joven había hecho botellón. A eso, le tenemos que sumar la incomodidad de dormir sin almohada y nos da como resultado, una noche horrible. Debido al ruido que generaban los más madrugadores, decidimos levantarnos sobre las 6:45h.
La mañana era bastante fría, así que me tuve que vestir de largo para soportar las primeras horas del día. Hay que apuntar que, el mismo albergue, se encargo de un buen desayuno para coger energías antes de salir a la aventura. Tostadas, cereales, avena... eso sí, ojo con el café que el hospitalario te echaba en el vaso. Si te despistabas, te daba un café "triple". Durante el desayuno conversamos con un alemán, el cual estaba interesado en nuestro "peregrinaje ciclista" ya que eramos los únicos que no íbamos a pie, eso sí, todo esto usando nuestro increíble inglés de Harvard.
Pasado el desayuno, recogimos nuestras cosas, hicimos unas fotos, dejamos nuestro donativo y preparamos las bicicletas para nuestro primer día como bicigrinos.
Hay que decir que la noche anterior, trazamos en el mapa el recorrido a seguir hasta el Camino en sí ya que, el albergue se encontraba un tanto apartado de la ruta. Y como era de esperar de nosotros, empezamos a dar vueltas por calles y callejones, dando antes con los últimos fiesteros de la noche que con las flechas o conchas amarillas que marcaban el camino hacía Santiago.Eso sí, dimos con la catedral a la primera, lugar donde realizamos varias fotos para luego emprender de nuevo la búsqueda de la primera flecha amarilla. Tras varios mareos con las calles de la ciudad, al fin dimos con la primera marca, la cual nos llevo hasta el Monasterio de San Marcos, convertido hoy en día en un parador de lujo y junto a este un museo del propio monasterio. Tras este pasaremos por un puente que nos llevará a las afueras de la ciudad para seguir por un camino paralelo a la carretera. Mencionar que, gran parte de la etapa de este día, transitaba paralelamente junto a la carretera con pequeños desvíos por el interior de los campos y prados de Castilla y León.
La etapa se iba haciendo fácil de llevar debido a que era completamente llana, con unos pequeños repechos al inicio.
Finalmente, llegamos a Villadangos del Páramo, nuestro punto de parada para merendar y reponer energías.
Respecto a peregrinos, durante este días vimos bastante poca gente, aunque el número fué incrementandose a medida que nos acercábamos más a Astorga, lugar donde acabaríamos la etapa.
Tras varias horas de pedaleo llegamos a Astorga. En un principio no dábamos con el albergue. Por suerte, una mujer mayor nos indicó donde se encontraba dicho albergue, que en ese momento estaba justo encima de nosotros.
Como anécdota, esta mujer nos preguntó de donde veníamos. Al comentarle que eramos de Mallorca, se le puso una sonrisa de oreja a oreja dado que, casualidades de la vida, había pasado media vida viviendo en la isla, lugar donde aún se encontraban sus hijos. Tras un rato de charla, proseguimos hasta el albergue.
Justo en la entrada, Kiko se dió cuenta de que se había dejado el credencial en uno de los albergues donde paramos a sellar. Menos mal que fué el primer dia; llegar a ser ya en Galicia y se hubiese quedado sin Compostela y marca de que hizo el Camino, que, al fin y al caso, es uno de los objetivos de todo peregrino/bicigrino.
Una vez sellado el credencial y guardadas las bicis, nos indicaron la habitación donde se encontraban nuestras camas. Esta habitación la compartiríamos con otro bicigrino, el cual también salió desde León. No recuerdo el nombre, tan solo recuerdo que era de Girona.
Dejamos los trastos, nos pegamos unas duchas y decidimos salir en busca de algún bar donde comer algo.
Eran casi las 16h (habíamos llegado sobre las 15:15h.) así que la cosa podía pintar un poco difícil dado que a esas horas las cocinas ya se encontraban cerradas. Nos acompañaba el gironés (lo llamaremos así), aunque él, al poco tiempo, se desmarcó para comer en un restaurante el famoso plato típico de allí, el cocido maragato. En cambio, nosotros nos paramos en un bar para comer un menú que entró con muchas ganas tras el día de pedaleo.
Una vez teníamos el estómago lleno, nos introducimos por la ciudad para visitar, entre otras cosas, su catedral y el palacio de Gaudí, las arquitecturas más sobresalientes de Astorga.
Tras un largo paseo y con los primero síntomas de cansancio, decidimos parar a comprar algo de comida para la cena y el desayuno y, posteriormente, acabar en el albergue para descansar.
Para los que vayáis, recomendaros un supermercado el cual, parte de su suelo, se encuentra acristalado. Esta situación es debido a que parte de su subsuelo, se encuentran las antiguas cloacas de la antigua Asturica Augusta.
Finalmente, acabamos en el albergue. Por la noche, Jaume, nuestro chef del día, decidió prepararnos unos espaguetis improvisados y tras la cena, nos quedamos charlando con varias personas, recalcando dos hombres mayores catalanes, con los cuales, pasamos un buen rato de risas antes de irnos a dormir.

A continuación tenéis los datos del albergue Siervas de María.
Un albergue, desde mi punto de vista, muy bueno con buenas camas y bastante completo(cocina, internet, parking bicis..) y el precio fué 5€.